VISITA AL MÉDICO

Conociendo y cuidando a tu bebé

Empezá a disfrutar de tu embarazo! Por fin ya pasaron las náuseas. Entraste en el cuarto mes y muchas tenemos una inyección de energía.

El médico te indicará  hacerte una ecografía. El bebé está todo formado y tiene forma de personita. Es ideal para obtener una foto completa del bebé. Además hace todas las monerías para mamá y papá: abre y cierra la mano, saluda, se chupa el dedo. Y si no hace nada de esto puede ser que esté durmiendo. No seamos tan exigentes, ya lo hará. Por lo general ya pasó el riesgo de abortos espontáneos, pero atención con los excesos de actividad, que pueden acarrear dolores pelvianos. Si ceden con el reposo podrían ser contracciones, de modo que el tratamiento es disminuir la actividad, en algunos casos de forma completa. Ya empieza a crecer la panza y queremos que todo el mundo lo note. Sí, tu bebé está ahí, todo formado. Necesita crecer y madurar. También aumentamos de peso, sin excedernos pero aportando todos los nutrientes necesarios. Por lo general, damos un suplemento de calcio y otro de hierro pasadas las náuseas, ya que el crecimiento del bebé es exponencial y muy veloz. Los controles son mensuales, evaluamos peso, presión, altura uterina y damos las órdenes para los estudios. No es necesario hacer tacto si no se experimentan contracciones ni hemorragias. Hay embarazos finalizan hacia el final del segundo trimestre (28 semanas), pero por supuesto no es lo ideal. El bebé debe permanecer en su incubadora natural todo el tiempo posible, hasta que alcance la madurez especialmente de los pulmones. Las ecografías subsiguientes evalúan el crecimiento fetal, la posición, la cantidad de líquido amniótico, la implantación de la placenta y sus características y descarta malformaciones. También un ecografista habituado a evaluar embarazos puede decirnos si es nena o varón. Cuidados pre- natales Durante la consultas mensuales tu médico te pesará, verificará tu presión sanguínea y tomará una muestra de orina para realizar un examen de azúcar o proteína en la orina (que pueden indicar diabetes gestacional o presión sanguínea alta inducida por el embarazo). A su vez  el médico medirá tu abdomen para determinar si el bebé se está desarrollando al ritmo esperado.  En esta etapa también pueden pedirte las siguientes pruebas prenatales. Ultrasonido:  A través del uso de ondas sonoras de alta frecuencia, el ultrasonido crea una "fotografía" del bebé en desarrollo. Esta prueba ayuda al médico a determinar la edad del feto, a detectar fetos múltiples y condiciones tales como defectos del tubo neural.  Alfa-fetoproteína (AFP) o detección selectiva de marcador triple:  La AFP es una sustancia producida por el feto. Esta proteína está presente en el torrente sanguíneo y puede medirse con una simple prueba sanguínea. Una detección selectiva de marcador triple es similar a una prueba AFP, pero proporciona resultados más específicos debido a que también mide las hormonas estriol y hCG. Los niveles anormales de estas sustancias pueden indicar un mayor riesgo de problemas tales como defectos del tubo neural o síndrome de Down; aunque esta prueba no diagnosticará estas condiciones. Si la prueba de detección selectiva es anormal, el médico le sugerirá la realización de pruebas adicionales, tal como un ultrasonido, para determinar el porqué de estos resultados.  Amniocentesis:  Esta prueba generalmente se ofrece solamente a mujeres que tengan un alto riesgo de tener un bebé con defectos genéticos; por ejemplo, mujeres mayores de 35 años de edad o que tengan antecedentes familiares de trastornos heredados. Este procedimiento puede detectar o descartar trastornos tales como síndrome de Down y defectos del tubo neural. Guiado por el ultrasonido, el médico o el técnico médico inserta una aguja larga y hueca a través del abdomen hasta llegar a la bolsa amniótica. Se busca obtener una muestra de líquido amniótico, la cual será  enviada al laboratorio, donde las células desprendidas del útero se cultivaran y analizaran para detectar problemas cromosómicos.  Prueba de tolerancia de glucosa:  Esta prueba se realiza para detectar signos de diabetes gestacional. La prueba es muy sencilla: Se ingiere una solución endulzada y, una hora después, se toma una muestra de sangre para determinar el nivel de azúcar en la sangre.  Prueba de hemoglobina:  Esta prueba mide la cantidad de glóbulos rojos en la sangre. Cuando hay muy pocos glóbulos rojos esto puede indicar anemia, lo cual es un problema común durante el embarazo que puede remediarse fácilmente.